El año pasado, los productores australianos obtuvieron la mayor rentabilidad desde 2006 y, según los resultados de la Australian Pastoral Association (MLA), los ingresos por ventas fueron los mismos que en 2015. También en el informe de MLA, se observa que los fabricantes australianos han logrado la mayor productividad al aumentar las características de peso del ganado, por lo que la eficiencia y la rentabilidad de la cría de ganado está en el nivel más alto. En 2015, el costo del ganado australiano ha aumentado significativamente, alcanzando las tasas de crecimiento de los aranceles mundiales para el ganado, y posteriormente los efectos de una sequía a largo plazo en 2012-2014.
Pocos estados tienen todas las posibilidades de elogiar la rentabilidad a largo plazo de la producción actual de carne de res, lo que llevó a un aumento en el costo, lo que mejoró los resultados para las granjas australianas en 2015. El país ha mostrado este resultado, a pesar de la continua variabilidad climática (especialmente la sequía) y el aumento de las limitaciones de recursos y ambientales. Pero, esto no impide que los productores y exportadores australianos de carne de res consoliden sus posiciones en el mercado global. 
